22 de junio de 2018

Myanmar - Monywa - Lago Kan Thar Yar


El paseo del ocio y los enamorados

Después de la visita por Bodhi Tahtaung, con sus mil budas, y Aung Setkya Paya con sus budas gigantes, primeramente tenemos la intención de que nos dejen en la ciudad y no en el hotel, así podremos pasear por ella, pero miramos la hora, y el atardecer nos pillaría aquí, por lo que volver al hotel andando por el arcén de la carretera no nos da mucha confianza, y tendríamos que buscarnos la vida con el transporte, y en este viaje no estamos por la labor, vamos de comodones totales; así que finalmente decidimos quedarnos en el hotel y pasear por los alrededores. 



Cruzamos la carretera frente al hotel con mucho cuidado, hay bastante tráfico, ya que al otro lado hay una paseo junto al lago Kan Thar Yar, donde se concentra la gente y la basura, casi diría que a partes iguales desgraciadamente. 



Casi frente al hotel hay un restaurante, que yo tenía registrado con otro nombre, situado en una pequeña isla en el lago, por lo que se llega cruzando un puente, del que había visto fotografías muy chulas, pero ya no es el mismo, ha perdido su bonita forma zigzagueante, y aunque mantiene sus “eses”, no mantiene sus curvas ni sus reflejos. El motivo del cambio lo desconozco, no sé si porque era demasiado inestable, o porque alguna crecida se llevara el antiguo, además el color rojo ha dado paso al blanco, con lo que no hay nada de lo que yo había visto. 



Paseamos junto al lago. 




En el paseo hay elementos de juego, o de amor (la carroza de cuento), o incluso escultóricos, por supuesto tampoco faltan puestos de comida y bebida; es un poco raro la verdad. 





En otra isla del lago se alza una pagoda que está siendo restaurada, pero no llegamos hasta ella, solo hasta la puerta de entrada que da al puente, y es que de repente empezaron a circular motos cruzándolo y el poco encanto que tenía, desapareció por completo. 





Así que en lugar de continuar hasta la pagoda y seguir cruzando el lago por una pasarela –por lo menos según google maps- que llega hasta un cementerio y desde aquí a otra orilla del lago, decidimos dar media vuelta e irnos al hotel, donde vimos un tímido atardecer.