Letras de viajes nace con la idea de compartir nuestros viajes, intentaré que no sea sólo una guía que pueda ayudar en los destinos, también contendrá las sensaciones y emociones que nos produce descubrirlos, aunque muchas de ellas se quedarán en nuestros corazones porque compartir algo tan íntimo siempre es difícil si no se tiene la suficiente confianza, que todo llegará con el tiempo y el fluir de las palabras, aunque soy muy parlanchina y al final termino contándolo todo.
De antemano pido disculpas por si cometo errores arqueológicos, arquitectónicos, de situación, no siempre se tiene todo controlado ni aprendido ni recordado. Quizás por esto de recordado es por lo que llego a este blog, para que lo viajado y vivido no se pierda de mi memoria, pero ¿recordaré la dirección de dónde ésta se encuentra a partir de ahora?
Creo que escribiré como en un diario, las rutas realizadas en el día y sus descubrimientos, que es como más cómoda me encuentro a la hora de relatar un viaje y no haciendo una mera relación de lugares. Pero, como decía el poeta, “caminante, no hay camino se hace camino al andar”, con lo que todo dependerá del momento en que me siente a escribir y compartir con vosotros.
Poco a poco iré contando nuestras experiencias y, si os apetece acompañarnos, sois bienvenidos a nuestra pequeña salita de estar.
PD: El tú y el nosotros será constante porque viajamos dos pero principalmente escribiré yo, Maca.
Maca aquí tienes el primer seguidor, mucha suerte.
ResponderEliminarAqui estoy yo para seguirte y viajar por este mundo mundial que contigo se nos hará pequeño. Una idea estupenda. Mil gracias. Coloma
ResponderEliminarPues eso, te seguiré para "empaparme" bien de todo aquello que nos cuentes. Suerte...!!!!
ResponderEliminarGracias Manuel, Coloma y Kertassi. De momento para vosotros no habrá nada nuevo, pero espero que llegue, aunque haya que esperar.
ResponderEliminarBueno, al fin he llegado y aunque sólo me he leido la introducción; te auguro un largo recorrido (desde luego kilómetrico)... me serviré un buen café, o uno de esos "especiales" tés y, ahora, como es invierno, me acurrucaré en la manta y me sentaré en mi vieja mecedora a oirte contar, mejor relatar esas mil andanzas por el mundo. Un beso enorme y mucha suerte.
ResponderEliminarGracias Mónica por llegar. Siempre mejor con un té, especial o no, que con café. Lo que es seguro es que con tu estupenda ayuda podré recorrer todos esos largos kilómetros.
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