Había
una vez un circo….!
En este paseo por The
Strip pasamos de Roma -en el Caesars Palace- a Venecia, llegamos al complejo The Venetian, uno de los hoteles más grandes del mundo. Hay una gran plaza donde se pueden ver réplicas de la plaza de San Marcos, su Campanile, el Palacio del Dogo, y el
Puente de Rialto, puente que por supuesto no está situado tan cerca. Si de repente alguien grita ¡acción! te lo crees, es un decorado de película, aunque para nosotros de terror de serie Z -quien conozca la belleza de Venecia no tendrá ninguna duda-.
Hasta la zona de
entrada y salida de vehículos está decorada con pinturas en su techo -¡si Tintoretto pudiera gritar!- .
En el interior no
falta la zona de compras, Grand Canal Shoppes.
Por supuesto en este espectáculo sin medido no puede faltar su
propio canal, a modo del Gran Canal, ¡con gondoleros!, pero de verdad ¿a
alguien le gusta esto en serio?...pues por lo bien que se lo pasaban algunos en las góndolas, sí, sí y sí.
En el interior, de nuevo la plaza de
San Marcos a escala pequeña y sin Campanile, con un techo decorado a modo de cielo inmaculado...solo faltan los angelitos.
Lo mejor, el
escaparate de una pastelería, azúcar y chocolate para el body.
Por un pasillo
opulento llegamos a la no menos opulenta zona de recepción.
Al lado de The Venetian. el
hotel The Palazzo, por lo que no nos movemos de Italia.
Enfrente, en primer
lugar The Mirage, que en aquel momento ofrecía un espectáculo musical de The
Beatles.
Supuestamente en el
exterior se realiza un espectáculo de un volcán en erupción, pero no
preguntamos si continuaba en funcionamiento y su horario, por lo que si sigue
vigente nos lo perdimos.
En la zona de
recepción hay un gran invernadero, con luz natural y abundante vegetación.
En The Mirage se
puede tomar el tram para moverse entre casinos, transporte gratuito.
A continuación de The
Mirage, Treasure Island.
En el exterior hay un barco pirata, donde antes se realiza un espectáculo de ellos, aunque eran las piratas las que tenían protagonismo
Aprovechando el tirón marítimo, otro pequeño barco para un restaurante.
Enfrente el complejo
de Wynn-Encore, donde antes estaba el Desert Inn.
La locura continúa,
enfrente de este complejo hay una amplia extensión de terreno que está en obras, se construye un
megacomplejo de nombre Resort World Las Vegas, que va a dejar en pañales a todo
lo que se ha construido hasta el momento...la excentricidad al poder.
Mucho más arriba,
cerrado y seguramente destinado a desaparecer, el mítico Riviera.
En Las Vegas hasta el
McDonalds te da la bienvenida.
Y de un payaso a
otro, llegamos al Circus Circus, cuyo interior, ya que fuimos capaces de entrar,
era un auténtico despropósito, con familias y más niños que en ningún otro
lugar, y no deja de ser otro casino, al que quieren conferir un ambiente más
familiar.
Enfrente el hotel
casino SLS, con una cara conocida publicitando su local, José Andrés, con un buen jamón en mano... ¿premonición del futuro?, porque anda de pleitos con el mismísimo presidente de los USA.